Blusa verde con estampado floral - Hack M7974

Hola a todas. Hacía mucho que no escribía este saludo y lo cierto es que lo he echado de menos (espero que vosotras también😉) . No os voy a aburrir contando las mil cosas que me han ido pasando y que me han impedido ser constante en el blog en estos dos años, pero el resumen sería que la universidad me quita mucho más tiempo para coser del que me gustaría y la pandemia no ha ayudado mucho tampoco. Sin embargo, y tal y como os comentaba al principio, lo he extrañado mucho, me encanta coser, escribir posts sobre lo que hago y sentir que entre todas estamos formando una bonita comunidad de personas que disfrutan con el mismo hobby. Por eso, que me he propuesto ir volviendo poco a poco (y me hace mucha ilusión).

Hoy os voy a enseñar una blusa que empecé a coserme hace varios meses y que terminé a principios de verano. Aquellas que me sigáis en Instagram ya os sonará porque he ido subiendo actualizaciones conforme la iba avanzando (este es uno de los muchos motivos por los que si no me sigues en Instagram deberías hacerlo pero ya, te estás perdiendo todo el "behind the seams" o el "entre costuras" de lo que hago). 

Patrón

Como podéis leer en el título, el patrón que he utilizado es el  M7974 de McCall´s. Lo compré en la web de Minerva pero ya no está disponible aunque, si os interesa, lo podéis encontrar en la web de McCall´s en digital y, en papel, en webs como Etsy o Amazon. 

Si bien no he sido fiel a ninguna de las versiones (os hablaré de ello más detenidamente en la sección "Modificaciones"), la que más se asemeja a mi blusa es la A (por las mangas) y es la que me gustaría hacerme tal cuál el próximo verano (ya he comprado la tela y los botones así que no hay escapatoria). Había pensado hacer un Coseconmigo, ¿qué os parece la idea?  

Ahora que viene el frío, igual me hago la opción B en vestido o en blusa (parece que les he cogido cariño), aprovechando que seguramente use esta misma versión como base para otro vestido que veréis pronto si todo va bien.

Tela

En cuanto a la tela que he utilizado, es una tela plana de poliéster. Al principio, dudé sobre si comprarla o no ya que, por lo general, no me gusta utilizar tejidos sintéticos pero el estampado me gustaba mucho y decidí arriesgarme. ¿Me arrepiento? Pues veréis, si bien el estampado me sigue pareciendo precioso y cada vez que abro el armario me alegra, he de decir que la tela ha sido algo difícil de trabajar ya que es bastante escurridiza y eso dificulta el corte y la confección. 

Ahora que ya la he terminado, estoy contenta con el resultado y creo que ha merecido la pena (además de que tengo otros 2 metros así que más me vale convencerme de ello), sobre todo porque al final conseguí cogerle el truco a base de ir probando cosas. Por si os interesa, lo que mejor me ha ido ha sido usar una aguja Microtex y muchos alfileres al unir las piezas (¿qué os parecería si escribiera un post sobre trucos para coser telas ligeras y escurridizas?). También decidí hacer costuras francesas para conseguir unos acabados muy bien pulidos (en las historias destacadas de mi Instagram podéis ver la prenda por dentro). En telas delicadas merece la pena.

Además, me parece que el patrón pega mucho con este tipo de estampados (como podéis ver en la sección “Inspiración”) y el que las flores sean de varios colores facilita las combinaciones de la blusa con otras prendas; así que, en mi opinión, ha sido todo un acierto la elección del tejido. 

Modificaciones

He hecho cuatro cambios al patrón:

     1. El volante del bajo

Como ya os he comentado varias veces, el patrón solo trae versiones de vestido así que tuve que cambiarlo por mi cuenta para hacerlo blusa. 

Es una modificación muy sencilla, solo hay que obviar las piezas de la falda y sustituirlas por rectángulos que, al fruncirlos, se convertirán en volantes. Otra opción es usar las piezas de la falda pero acortándolas para hacerlas volantes. En mi opinión, salvo que el cuerpo y la falda tengan forma y la quieras mantener (si fuera un corpiño por ejemplo), es mucho más fácil utilizar rectángulos. ¿Por qué? Lo primero, el espacio: te evitas guardar piezas de una falda que, por lo general, van a ocupar más que dos rectángulos (y eso solo si no los puedes dibujar directamente sobre la tela); y, el segundo, los frunces: al dibujar tú los volantes, controlas la cantidad de volumen que les das, así te aseguras de que van a quedar según tus preferencias.

Por si os sirve de referencia, yo corté en total 2 rectángulos, para el delantero y el trasero. Los 2 los hice de largo el doble que el cuerpo pero, al del delantero, le añadí 4 cm para pulir los laterales ya que a su vez este rectángulo lo corté por la mitad. Esto lo hice para poder ponerme la blusa más cómodamente al desabrochar los botones ya que se queda completamente abierta. En cuanto al ancho de los volantes, como la tela era difícil de trabajar, no quería arriesgarme a que el bajo no me quedara recto por lo que ambas piezas las corté el doble de ancho del tamaño final (más márgenes de costura) para que la doblez hiciera de dobladillo. 

     2. Las mangas

Si bien todas las opciones de manga me encantan (sobre todo las de la A, donde haya un lazo, ahí estoy yo), al terminar la blusa con un volante en el bajo quería que las mangas fueran a juego y llevaran también otro volante. Para ello, utilicé como punto de partida las mangas de la A, de forma que no tuviera que modificar la copa de la manga, y jugué con el ancho y largo del patrón. Medí mi contorno de brazo y me aseguré de que la manga fuera el doble de larga que éste y, en cuando al ancho, añadí el tamaño del volante y márgenes de costura. 

Al principio, la técnica que iba a seguir para añadir el volante y terminar la manga es la misma que os explico aquí pero tuve algunos problemas con la tela y decidí cambiar de método. No os voy a hablar de él en profundidad (aunque si me seguís en Instagram, sabéis de lo que os hablo) ya que, conforme iba haciendo las mangas y obteniendo un resultado que ya sí me convencía, decidí que era algo útil que enseñaros (sobre todo si, como era mi caso, estáis trabajando con telas difíciles) y, por eso, planeo crear un minitutorial en historias destacadas (actualizaré este post cuando ya lo haya subido). No es nada del otro mundo pero, cambiando algunos pasos y cortando una pieza extra, se puede obtener un resultado igual de limpio que el que os explico en el otro post y sin sufrir con la tela. 

     3. La abotonadura

Estaréis de acuerdo conmigo en que ya son varias temporadas en las que está de moda este tipo de siluetas en los vestidos y blusas, donde se acentúa la cintura. Es por eso que he ido viendo muchos vestidos muy similares a este patrón y lo que más me gustaba de ellos era cómo se abrochaban. No era con los típicos ojales (y que tanto nos imponen al principio) sino con presillas. Me parece que quedan genial y es por eso que decidí incorporar este detalle a mi blusa. 

Como hay que cortar 2 de la pieza de la cintura para forrar el interior aproveché para coser las presillas en la costura lateral. También utilicé botones forrados de la misma tela haciendo contraste con el fondo.

Me gusta mucho el resultado final y lo cierto es que las presillas no son nada difíciles de hacer, solo hay que tener algo de paciencia, además de que tienen muchos usos si las haces más anchas, como de tirantes espagueti. Por si también queréis incorporarlas a alguna de vuestras prendas, pronto subiré a Instagram un vídeo explicando cómo hacerlas (también actualizaré el post cuando ya lo haya publicado).

     4. Ajustes en el cuerpo

No se trata de una modificación como tal pero como creo que os puede ayudar y sí que me he saltado las instrucciones, vamos a contarla como el cuarto cambio.

He visto varias veces por redes a varias chicas contando su experiencia con este patrón y muchas de ellas coincidían en que era algo difícil conseguir un buen ajuste. Por eso, decidí no arriesgarme y coser una prueba antes de lanzarme a cortar la tela. Me decanté por una talla más de la que suelo usar por lo general ya que le dí prioridad al contorno de pecho (guiándome también por las opiniones de otras chicas) y me alegro de haberlo hecho ya que, de lo contrario, no me habría abrochado la blusa. Por este motivo, al coser los laterales de la blusa, tuve que utilizar un margen de costura mayor al que había añadido a los patrones, quitando de los lados unos 3-4 cm extras en total. 

Esto, os puede ser de gran ayuda sobre todo a las personas que, como yo, tenéis más pecho y vuestra talla de contorno de pecho es mayor que la de cintura o cadera. Ajustar la blusa de los lados es muy sencillo pero que la blusa no os abroche es más difícil de arreglar (si no imposible) así que tened cuidado y prestad especial atención a las medidas. 

Conclusión

En mi opinión, no se trata de un patrón difícil de coser. A mí se me complicó por la elección de la tela pero, quitando eso, no tuve ningún problema durante la confección. 

Tenía algo de miedo ya que es el primer patrón de McCall´s que coso y no había oído muy buenos comentarios. Sin embargo, me ha sorprendido para bien. Las instrucciones están tanto en español como en inglés, siendo estas últimas algo más completas. Además, cada paso viene acompañado por dibujos técnicos (solo están en las instrucciones en inglés por lo que tienes que ir fijándote en la numeración de los pasos para buscar el dibujo correspondiente). Las instrucciones son algo escuetas, lo que no me sorprende (ya os digo que mis expectativas eran bajas) ya que las de las revistas de costura son también malísimas (no os preocupéis que no les ganan a confusas) y esperaba que fueran del estilo. La parte positiva es que si alguna vez habéis cosido algún patrón de revista, os van a parecer bien explicadas y los dibujos, un regalo. 

Aún así, me sigo quedando con las instrucciones de patrones de diseñadores independientes donde cada paso está bien explicado e, incluso, se acompaña de fotos y/o un vídeo paso a paso en Youtube. 

Esta es una de las razones por las que me planteé hacer el Coseconmigo, si os puedo ahorrar pasar un mal rato, por qué no hacerlo, ¿no? Además, considerando que no es un patrón difícil y que lo puede hacer alguien con no mucha experiencia, me parece absurdo que lo que se le complique sea entender las instrucciones y no la confección de la prenda en sí.  

En cuanto al resultado final, estoy contenta y, como ya os he comentado, tanto es así que ya planeo hacerme alguna que otra versión más ( y algo bueno debe de significar eso). 

Detalles

Como una imagen vale más que mil palabras, os dejo algunas fotos más de la blusa:

Inspiración

Por último, he preparado una selección (vía Pinterest y Asos) de blusas bastante similares a la mía que os pueden servir de inspiración. Si os habéis quedado con ganas de hacernos una similar y no sabéis por dónde empezar, éste puede ser vuestro punto de partida.

¡Y eso es todo por hoy! Espero que os haya gustado mi blusa y, lo más importante, que os hayan resultado útiles todos los consejitos que os he ido dando. ¿Os animáis con el patrón? Y, de ser así, ¿lo dejaríais tal cuál o también lo transformaríais en una blusa? Nos vemos muy pronto por aquí (y con más ganas que nunca) y, mientras tanto, ya sabéis, ¡a seguir cosiendo!

Gema❤️